Nos levantamos temprano para encarar uno de los dos principales camino en los senderos del Chalten. Es aquel que nos llega a la Laguna de los tres en el pie del Cerro Fitz Roy pasando el campamento Poincerot, y tres lagunas: la madre, la hija y Capri.
Sabíamos que para llegar a nuestro primer objetivo estábamos a dos horas de ida con una dificultad media. Dependiendo de nuestro estado, (y conociendo nuestras limitaciones), consideramos caminar hasta donde podamos hacerlo.
Avanzando nos lleva a una subida pronunciada escalonada que nos deja sin aire entre los arboles de lenga. El día se había nublado y nos habían informado la posibilidad de ver algún Huemul.
El silencio es roto por un taladrar. Nos sorprende un pájaro carpintero magallánico con sus potentes picotazos en la corteza de los arboles. Al levantar la vista lo vimos muy cerca a nosotros. De cabeza colorada se posa por segundos en diferentes arboles. Lo intento seguir para sacar fotografías pero se adentra en el bosque. Un momento único.
Al continuar a los pocos metros el camino se divide en dos y tomamos el que va a la izquierda rumbo a la Laguna Capri. Malas noticias: comienza a llover. Nos damos tiempo para descansar y comer algo a la orillas y cercados por los bosque.
Al intentar seguir la lluvia y el viento se agudiza. Decidimos volver.
Duración: 2 horas (ida).
Dificultad: fácil.
Desnivel: 200 metros.
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